El vicepresidente del Consejo Regulador del Vino y presidente de la cooperativa del vino de Chucena (Huelva), Felipe Romero, ha apuntado que la cosecha de vid que actualmente se recoge es "la mejor de los últimos años" en cuanto a calidad, a pesar de que ha dado menos frutos.
En declaraciones, Romero ha asegurado que "hace años que no se ve una cosecha así, con esta calidad" y defendió que "ha influido mucho que no ha llovido este verano, como ha pasado en otros meses de agosto”.
Por otro lado, Romero valoró de forma positiva que las ayudas para acogerse a la medida europea prevista para reformar la Organización Común de Mercado (OCM) del vino, que recogía el arranque de 175.000 hectáreas de viñedos en la Unión Europea, tan sólo afectará a 200 hectáreas de estas viñas del Condado onubense, después de que se registraran 274 peticiones.
El vicepresidente reconoció que es "mejor así porque no se arrancarán viñas de forma masiva, tal y como se esperaba", aunque también añadió que "esto no quiere decir que los agricultores no decidan de forma personal, sin acogerse a las ayudas, arrancar sus campos de vid porque se trata de una población muy envejecida, de más de 60 años, que no cuenta con nadie que se encargue de continuar el negocio cuando se retiren, y las viñas son muy exigentes, necesitan mucho cuidado".
Fuente: Europa Press (19 de Septiembre, 2008)
En declaraciones, Romero ha asegurado que "hace años que no se ve una cosecha así, con esta calidad" y defendió que "ha influido mucho que no ha llovido este verano, como ha pasado en otros meses de agosto”.
Por otro lado, Romero valoró de forma positiva que las ayudas para acogerse a la medida europea prevista para reformar la Organización Común de Mercado (OCM) del vino, que recogía el arranque de 175.000 hectáreas de viñedos en la Unión Europea, tan sólo afectará a 200 hectáreas de estas viñas del Condado onubense, después de que se registraran 274 peticiones.
El vicepresidente reconoció que es "mejor así porque no se arrancarán viñas de forma masiva, tal y como se esperaba", aunque también añadió que "esto no quiere decir que los agricultores no decidan de forma personal, sin acogerse a las ayudas, arrancar sus campos de vid porque se trata de una población muy envejecida, de más de 60 años, que no cuenta con nadie que se encargue de continuar el negocio cuando se retiren, y las viñas son muy exigentes, necesitan mucho cuidado".
Fuente: Europa Press (19 de Septiembre, 2008)
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