El turismo ha sido siempre la asignatura pendiente del Condado. A pesar del legado cultural del vino del que pueden presumir municipios como Rociana, La Palma o Bollullos, e incluso el imponente patrimonio arquitectónico e histórico del que se vanagloria Niebla, lo cierto es que la presencia de turistas por sus calles, bodegas o plazas siempre ha sido testimonial y anquilosada de forma inescrutable por la falta de oferta hotelera.
Sin embargo, y ajeno a los tiempos de crisis que corren, o quizás precisamente debido a dicha coyuntura y la necesidad de buscar otros yacimientos de empleo más allá de la agricultura y el ladrillo, lo cierto es que tanto las corporaciones locales como el sector empresarial parecen haber comenzado a confiar en las potencialidades de la comarca. De momento y aunque la apuesta está siendo comedida, se están sentando los cimientos que podrían hacer virar este déficit gracias a la implantación de infraestructuras hoteleras. Muchas son las voces que reconocen que turísticamente el Condado se encontraba "dormido" o que no había creído en sus posibilidades, quizás constreñido o incluso acomplejado del potencial de las playas o la propia sierra. Todo ello sin entender que ambas ofertas a uno y otro lado de nuestro territorio, lejos de solaparse podrían complementarse y lograr las sinergias tan anheladas por el sector, siempre y cuando el diseño de plazas hoteleras se realice con criterio, mesura y sin sobredimensionar la oferta más allá de las propias capacidades de captación.
De momento, la delantera que llevan otras zonas de España es alta y parece difícil poder contrarrestar el terreno perdido. Por contra, en el otro lado de la balanza se encontraría el que se trabaje sobre un terreno virgen. Fruto de todo lo enunciado, un grueso de iniciativas han comenzado a germinar y otras ya se encuentran en proyecto. La Palma del Condado es, sin duda, el municipio que ha tomado la delantera en este campo y ya dispone de dos centros hoteleros de dos estrellas. No obstante, la gran apuesta viene de la mano de la inversión y las sinergias turísticas que genera el circuito de velocidad Monteblanco. Precisamente esto hace posible que sus propietarios ya proyecten la construcción de un hotel de cuatro estrellas, con zona de restaurantes, salón de convenciones, museo y un espacio de naves-taller para que los constructores puedan instalar en el circuito su base permanente. Por otra parte, las carreras y exhibiciones de Ferrari, Porsche o Mercedes han contribuido a disparar (si bien de momento de forma esporádica) la presencia de un turista con alto poder adquisitivo que demanda infraestructuras de gran nivel. Cabe recordar que en dicho circuito han entrenado equipos de Fórmula 1 como Williams y Maclaren junto con sus pilotos Lewis Hamilton y Heikki Kovalainen. Los propietarios del circuito tienen en cartera la construcción en tamaño real de un tramo de Mónaco. Se trata de 1.200 metros de recorrido que simularán centímetro a centímetro las famosas curvas de Mirabeu, Lowes y Portier que han dado fama y prestigio a uno de los circuitos más emblemáticos del circo de la Fórmula 1.
Paralelamente y en clave turística, el Ayuntamiento palmerino también trabaja en la apertura de un albergue juvenil a orillas del emblemático Corumbel, en cuya construcción ya trabaja un taller de empleo, según fuentes municipales. Más humildemente, Rociana ya puede presumir de disponer del hostal-posada El Alambique, un señorial edificio agrícola que ha sido reconvertido a uso hotelero, cuya titularidad corresponde al Ayuntamiento y está siendo explotado por empresarios del sector mediante concesión administrativa. El edificio cuenta con restaurante en varios niveles, terrazas y zonas verdes sobre un área de 909 m2. El alcalde de Rociana, Amaro Huelva, señala que la importancia de contar con esta infraestructura no reside meramente en la posibilidad de rescatar uno de los patrimonios culturales de la zona, si no la posibilidad de contar con plazas hoteleras que permita a los visitantes poder pernoctar y acabar con el perfil del turista de paso.
En Niebla este parece ser el camino a seguir, para lo cual el Pleno ya ha instado a las Administración autonómica al cambio de uso de unos terrenos agrícolas ubicados en el ST1 para permitir la explotación turística de la conocida finca San Lorenzo, donde se proyecta la construcción de un hotel rural. Así, la infraestructura podría poner la guinda a un municipio que hasta entonces carecía de lugar de pernocta y no podía rentabilizar en todos sus extremos las visitas que diariamente acuden a Niebla llamados por sus murallas almohades, el Castillo de los Guzmanes, la Iglesia de San Martín o la Iglesia Nuestra Señora de la Granada.
Bollullos tampoco se ha dormido en los laureles y el Pleno ya ha dado curso a la construcción de un hotel rural con 17 habitaciones que se proyecta sobre la Hacienda y el Convento la Morañina. Un turismo rural que, tal como destacó el concejal de Cultura, Manuel Moreno, tendrá como reclamo el enoturismo para lo que aboga por "derribar los localismos y apartar determinadas cuestiones capitales de la disputa política aunando voluntades y esfuerzos como en otras regiones de España como la Rioja". Entre los proyectos que tiene en cartera la institución local se encuentra De la cepa a la copa una iniciativa cultural tendente a vender a los visitantes todo el proceso que interviene desde que la vid coge vigorosidad en la cepa hasta que esta es trasformada en el mejor caldo. En esta línea se encuadran el Centro de Interpretación de la Viña o las catas populares maridaras con flamenco y poesía.
Fuente: Huelva Información (6 de Julio, 2009)
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