La vuelta al colegio de los alumnos del Centro Público de Primaria Los Perales tendrá que esperar. El hedor que proviene de una de las aulas de la primera planta del ala noreste del edificio vuelve a ser el detonante de que la AMPA suspendiera, ayer lunes, la jornada lectiva a la espera de que se adopten las medidas oportunas por parte de las diferentes administraciones y se elimine de forma definitiva este mal olor.
La situación es heredada del pasado mes de febrero, cuando se comenzó a constatar un hedor que parecía deberse a condiciones de humedad o problemas de cañerías. Entonces tras remitir el tufo y confirmarse por parte de los técnicos de Medio Ambiente de que el olor no era tóxico en términos de salubridad, el aula volvió a ser utilizada por los escolares, si bien nadie supo concretar el origen del olor.
Lo cierto es que la administración competente no da soluciones. Es por ello que Socorro Reyes, presidenta del AMPA, reprocha a las diferentes administraciones que se dediquen a eludir sus responsabilidades y meramente se escuden unas en otras, sin que ninguna de ellas afronte el problema y tome cartas en el asunto. De hecho, el 4 de diciembre el Consejo Escolar acordó dar un ultimátum a la administración local a fin de ponerle en conocimiento que, según los acuerdos adoptados, si tras la vuelta de las vacaciones el hedor no se solucionaba, los alumnos no entrarían al Centro.
El director Mario Díaz ha precisado que el claustro de profesores “se ha adherido a la medida adoptada por el AMPA”. En este sentido subraya que la solución no puede seguir eternizándose en el tiempo, dado que estas “aulas son necesarias para el ejercicio normal de la docencia, ya que acogen biblioteca y se imparten las clases de integración”. Paralelamente, Díaz asegura que no le han entregado ningún documento escrito que acredite que el mal olor “no es tóxico”. Los técnicos de la Diputación se limitaron a comunicárselo verbalmente.
El delegado de Educación, Manuel Gutiérrez, ha declinado, mediante un escrito remitido al Ayuntamiento, toda responsabilidad, al señalar que el tema es de competencia municipal.
El alcalde José Francisco Gómez recuerda que se levantó la soleria y se pulió, lo que “parece solucionó el problema el año pasado”. Así que el alcalde sostiene que “las medidas necesarias para solucionar el problema trascienden el normal compromiso de conservación y mantenimiento, puesto que no se sabe el alcance”.
Los niños vuelven hoy a clase en espera de lo que ocurre en la reunión prevista con Gutiérrez.
Olvidaron limpiar el colegio
La AMPA de Los Perales critica que “la limpieza en profundidad” que requería el centro haya quedado en suspenso “por culpa de un ‘olvido’ según dicen los dirigentes locales”. De esta manera la limpieza “se ha limitado” al suelo y mesas de alumnos y profesores. Socorro Reyes considera indignante que esta labor a desarrollar en “un edificio donde acuden niños” sea obviada, por lo que crítica la falta de celo de la que ha hecho gala el equipo de Gobierno del Ayuntamiento a la hora de cumplir con sus compromisos. El Ayuntamiento se comprometió a principio de curso a hacer en Navidad la limpieza que no hizo en verano.
La situación es heredada del pasado mes de febrero, cuando se comenzó a constatar un hedor que parecía deberse a condiciones de humedad o problemas de cañerías. Entonces tras remitir el tufo y confirmarse por parte de los técnicos de Medio Ambiente de que el olor no era tóxico en términos de salubridad, el aula volvió a ser utilizada por los escolares, si bien nadie supo concretar el origen del olor.
Lo cierto es que la administración competente no da soluciones. Es por ello que Socorro Reyes, presidenta del AMPA, reprocha a las diferentes administraciones que se dediquen a eludir sus responsabilidades y meramente se escuden unas en otras, sin que ninguna de ellas afronte el problema y tome cartas en el asunto. De hecho, el 4 de diciembre el Consejo Escolar acordó dar un ultimátum a la administración local a fin de ponerle en conocimiento que, según los acuerdos adoptados, si tras la vuelta de las vacaciones el hedor no se solucionaba, los alumnos no entrarían al Centro.
El director Mario Díaz ha precisado que el claustro de profesores “se ha adherido a la medida adoptada por el AMPA”. En este sentido subraya que la solución no puede seguir eternizándose en el tiempo, dado que estas “aulas son necesarias para el ejercicio normal de la docencia, ya que acogen biblioteca y se imparten las clases de integración”. Paralelamente, Díaz asegura que no le han entregado ningún documento escrito que acredite que el mal olor “no es tóxico”. Los técnicos de la Diputación se limitaron a comunicárselo verbalmente.
El delegado de Educación, Manuel Gutiérrez, ha declinado, mediante un escrito remitido al Ayuntamiento, toda responsabilidad, al señalar que el tema es de competencia municipal.
El alcalde José Francisco Gómez recuerda que se levantó la soleria y se pulió, lo que “parece solucionó el problema el año pasado”. Así que el alcalde sostiene que “las medidas necesarias para solucionar el problema trascienden el normal compromiso de conservación y mantenimiento, puesto que no se sabe el alcance”.
Los niños vuelven hoy a clase en espera de lo que ocurre en la reunión prevista con Gutiérrez.
Olvidaron limpiar el colegio
La AMPA de Los Perales critica que “la limpieza en profundidad” que requería el centro haya quedado en suspenso “por culpa de un ‘olvido’ según dicen los dirigentes locales”. De esta manera la limpieza “se ha limitado” al suelo y mesas de alumnos y profesores. Socorro Reyes considera indignante que esta labor a desarrollar en “un edificio donde acuden niños” sea obviada, por lo que crítica la falta de celo de la que ha hecho gala el equipo de Gobierno del Ayuntamiento a la hora de cumplir con sus compromisos. El Ayuntamiento se comprometió a principio de curso a hacer en Navidad la limpieza que no hizo en verano.
Fuente. Huelva Información (9 de Enero, 2007)
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